Marcha de antorchas desde
el Club Infantil Oroño a Tribunales Provinciales de Rosario ( Balcarce y Pellegrini )
A
2 años del asesinato del Jere, Mono y Patóm, lxs esperamos este Jueves 2
de Enero a las 19 hs en la Canchita del Club Infantil Oroño en Villa
Moreno, Presidente Quintana y Dorrego.
La marcha será
hasta Tribunales Provinciales (Balcarce y Pellegrini). Seguiremos
exigiendo Justicia Para El Jere, Mono Y Patóm, y recordándolos con mucha
mística.
No se suspende por lluvia (llevar paraguas...)
COMUNICADO DE PRENSA
De balances y voluntades: 2014, #SERÁJUSTICIA
Hoy,
miércoles 1 de enero, se cumplen dos años del asesinato de nuestros
compañeros Jere, Mono y Patóm. Dos años de hondas e irreversibles
ausencias, pero también de la edificación de una dignidad incontestable:
aquella que nos empujó a no precisar venganzas, sino a construir
pacientemente - aun contra todas las adversidades - un necesario punto
de inflexión en esta Rosario que, triste y paradojicamente, sigue
acrecentando sostenidamente su tasa de homicidios.
Hoy
podemos sentirnos orgullosos de haber iniciado un profundo e
ininterrumpido proceso de movilización que otorgó visibilidad a una
problemática estructural hasta entonces silenciada, que aun con cientos
de muertes jóvenes en nuestros entornos periféricos era fácilmente
"justificada" con la indigna nomenclatura del "ajuste de
cuentas".Pudimos debatir públicamente y ubicar las responsabilidades
donde es debido: desde un primer momento, sin rodeos, indicamos que la
corporación policial estaba estructuralmente anudada a los intereses de
la empresa del narcotráfico; sabida es la suerte que hoy corre Hugo
Tognoli, ex Jefe de Policía de la Provincia de Santa Fe, y sus pares
Pereyra y Maciel, responsables estos últimos de la Brigada Policial de
la flamante Secretaría de Delitos Complejos.
Nos
mantuvimos siempre inconmovibles en la denuncia al Ministerio de
Seguridad de la Provincia y su practico manual de cinismo al montarse en
una topadora con la finalidad de territorializar el narcotráfico,
circunscribiéndolo a entornos selectivamente determinados que, por
supuesto, eran nuestros barrios populares. No solo se trataba de la
indignidad de estigmatizar profundamente a la víctimas, sino de correr
el eje en relación a las responsabilidades estructurales: mientras
arribaban desbocadas topadoras a nuestros barrios, nadie se interesaba
demasiado en saber dónde se blanquea la plata grande del narcotráfico;
por qué razón en la ciudad del Dakar es común que amanezcan baleadas las
fachadas de las concesionarias de autos de alta gama; cómo es que la
justicia continúa, en el mejor de los casos, fragmentando
investigaciones, o mirando para otro lado ante escenarios cada vez más
complejos.
Sucede que hay muertes y muertes: un homicidio -
nos referimos al asesinato del "Pájaro" Cantero - sacudió profundamente
las estructuras del elenco ejecutivo provincial. En algo así como
treinta horas posteriores a este asesinato, tres homicidios se
perpetraron en plena geografía macrocéntrica, con la inconfundible marca
del sicariato. Esas muertes ameritaban algo más que la ridiculez de una
topadora ajusticiando a un nenito de 14 años. Allí, aunque no abundó en
los análisis respectivos, la amenaza que cundía sobre el sistema
político santafesino (si no se desarticulaba al menos el recrudecimiento
de una disputa en el interior de un universo conflictivo) cobraba una
gravitancia inusitada. Así como se agotó el recurso del "ajuste de
cuentas", todo pareció indicar a partir de allí que las topadoras ya no
convencían a nadie.
En forma paralela y coexistente con lo
anterior, nunca quisimos sacarle el cuerpo al territorio; es que, en
ultima instancia, es precisamente allí donde en parte se decide la
suerte de la pibada. Sostener un proceso de movilización incesante, que
genere un esquema judicial esperanzador en relación a la causa del
Triple Crimen, siempre supimos debía ser consustancial a la
profundización de nuestros proyectos territoriales, de nuestros ámbitos
de prefiguración desde donde intentamos habitar y ofrecer, hoy, aquí y
ahora, otro proyecto de sociedad, otros nichos desde donde construir
identidad (diametralmente opuestos a los de la violencia, corolario
irreprochable del retiro del Estado de nuestros territorios) para la
pibada joven.
Así, recibimos con dolor, pero también con
gran convicción y esperanza, un 2014 en el que indudablemente será
justicia. Manifestamos la seria voluntad de que las causas por los
homicidios, como así también la del encubrimiento policial, tramiten
juntas en la etapa de enjuiciamiento. Esta posición obedece a una razón
muy sencilla: lo que se ventilará en el juicio son los asesinatos de
nuestros compañeros, producidos en el marco de una trama densa y
compleja, donde el encubrimiento policial es un elemento constitutivo,
inescindible. Es imposible analizar una cosa sin la otra. Sabemos que
esto nos expone a la posibilidad de encaminarnos hacia un escenario de
juicio escrito, al que iremos convencidos y resueltos, atendiendo a que
nos sobra voluntad por profundizar la instancias de lucha que le
otorguen visibilidad a este proceso judicial que, entendemos, también
debe constituirse en un punto de inflexión sustantivo.
Aun
pesan y duelen sus ausencias, aun es difícil explicarse cómo es que
sucedió algo tan impensado. Nos reconforta, al menos, saber que la
imagen del Jere, Mono y Patóm hoy son un símbolo de esperanza y rebeldía
para muchísimos pibes, en muchísimos barrios. Que muchísimos pibes como
ellos se hayan puesto sobre el hombro el trabajo de multiplicar su
ejemplo no solo cada primero frente a Tribunales, sino participando en
la elaboración de un libro, de un Documental - Homenaje y, lo más
importante, militando todos los días para construir Justicia, Dignidad, y
la posibilidad de dejar de ser lo que han hecho de nosotros.
MOVIMIENTO 26 de JUNIO (M-26)
JUVENTUD DARIO SANTILLAN
FRENTE POPULAR DARIO SANTILLÁN
Contacto de Prensa
- Pedro Salinas, militante del M-26 (Frente Popular Darío Santillán): (0341) 156-879840